

Viendo este vídeo cualquiera pensaría que es la apertura de un nuevo centro comercial, la salida de un nuevo modelo de smartphone o un apocalipsis zombie. Pero no, no es eso. Los alumnos de Innsbruck (Austria) se apelotonan en la entrada de la biblioteca y corren en cuanto abre para coger sitio.
Como habéis visto, algo que sería impensable en países como España, en Austria sucede: estudiantes corriendo para poder estudiar tranquilos.